diumenge, 5 de novembre del 2017

10 preguntas sobre España


1. ¿Podemos encontrarnos ante el agotamiento del sistema institucional de 1978 y Catalunya ha sido el síntoma más claro de replanteamiento del Pacto Constitucional?

2. ¿Podemos aceptar que haya una Disposición Adicional Primera en la Constitución que ampare los derechos históricos de los territorios forales del País Vasco y de Navarra pero cuando piden algo semejante los catalanes se monta en cólera nacional?

3. ¿Se puede hablar de igualdad de derechos y obligaciones de todos los españoles si existen éstos hechos diferenciales?

4. ¿No sería mucho más razonable acercar el centro de decisiones a la ciudadanía y aprovechar la cuestión catalana para hacer más sostenible el modelo territorial y acercándolo al principio de subsidariedad consagrado en la UE?

5. ¿Es lógico que hayamos podido llegar hasta aquí cuando el desarrollo de la Constitución que se hizo con el Estatut de 2006 fue “cepillado” en las Cortes y recurrido una vez votado en referéndum en Catalunya por el PP?

6. ¿El mismo partido que recogía firmas contra el Estatut de 2006 y que presentó el recurso de inconstitucionalidad puede ser un actor que ayude a llegar a entendimientos que puedan acercar posturas cuando parte de esos antecedentes y lo mismo cabría decir de los impulsores del independentismo?

7. ¿Como puede pretenderse desde el independentismo que no haya consecuencias judiciales a las actuaciones que se han llevado a cabo en los últimos años y no estar dispuestos a gestionar la frustración ciudadana ante la dificultad de consecución de objetivos prometidos?

8. ¿Como puede pretenderse desde el Estado solucionar el conflicto única y exclusivamente con medidas policiales y judiciales que han traído episodios tan nefastos como los heridos durante el 1-O o el encarcelamiento preventivo de líderes de Asociaciones y miembros del Govern de la Generalitat?

9. ¿Se están calibrando y ponderado debidamente los efectos de haber aplicado un artículo de la Constitución -el 155- que muchos reconocidos juristas entienden que en ningún caso está pensado para destituir Gobiernos autonómicos y mucho menos para convocar elecciones autonómicas desde el Estado?

10. ¿Cuando habrá la suficiente valentía como para que los mismos personajes que nos han generado éste mayúsculo problema den un paso atrás y dejen paso a personas con ánimos más conciliadores, transigentes y que vean la cesión no como una debilidad sino como una fortaleza social?